viernes, 26 de noviembre de 2010

Oración al Sol

                            Sol: ¡tu fuerza, fuente de 
                                   toda vida, renovación y sustento
                                   portadora de luz y calor
                                   fortifique nuestros corazones!
                                  
                                   Para que se mantengan puros
                                   como el oro inmaculado
                                   inviolables a la corrupción
                                   erguidos y veraces
                                   nobles y plenos de
                                   dignidad humana.
                                                                              Rudolf Steiner

Con esta oración estamos iniciando las reuniones de Padres y Maestros de los jueves. Expresa un lindo deseo...

lunes, 15 de noviembre de 2010

Alma de niño


Alma de niño

Todo ojos
todo oídos
cáliz
son los niños
cuenco son
con fondo color púrpura

en el que caen imágenes
gotas del Universo
que sedimentan
para resurgir algún día
por secretas sendas
y renacer
hechas sol.

Daniel Wirz

Con esta oración comienzan las reuniones de jardín de infantes en la escuela. Para nosotros se acabaron: el más pequeño ya se va para primaria el año que viene. ¡Pero cuánto las disfrutamos! Cada vez que la maestra Carolina lee esta oración, siento cómo me emocionan sus palabras. Tenemos una responsabilidad inmensa como padres... Los pequeños nos miran...

jueves, 11 de noviembre de 2010

Kermesse Perito Moreno 2010

¡Cuánto hace que no escribo! Últimamente hay demasiadas ocupaciones... ¡Qué feo es vivir "distraído"! Tengo que encontrar la manera de organizarme para poder hacer más lo que me gusta...


El sábado tenemos la Kermesse del colegio. ¡Qué evento especial! Lo estamos disfrutando desde la preparación. ¡Tejí unas bellotas que, modestia aparte, quedaron bastante bien! Y unas pelotas que me imagino les van a gustar a los niños.

miércoles, 6 de octubre de 2010

El juego infantil

EL JUEGO INFANTIL es el nombre de un librito escrito por Elke Blattmann y Rudolf Kischnick, de Editorial Antroposófica, que es muy interesante. Como padres, nos hace pensar en el mundo que “creamos” para nuestros pequeños. Copio aquí algunos párrafos, aunque es difícil seleccionar partes cuando el libro entero es tan acertado en sus apreciaciones. Más adelante, nos da consejos sobre los juguetes más adecuados para nuestros niños y sobre qué hacer ante la "avalancha" de juguetes que suelen acumularse en una casa cuando llega un niño.

“¿A qué juega hoy en día el niño en la etapa preescolar? En lugar de una respuesta, cada vez se oye a más madres decir con pesar. ´Mi hijo no sabe jugar. O alborota como un salvaje o está por ahí aburrido; si yo no le doy una ocupación, no hace nada que tenga sentido´.

La capacidad de los niños para jugar parece ir disminuyendo cada vez más. Con frecuencia, para estimularlos los padres preocupados compran un juguete tras otro. Pero esto únicamente empeora la situación. En su habitación llena hasta los topes está el niño sin saber qué hacer.

¿Qué es lo que quiere el pequeño al venir a este mundo? Quiere vivenciar el mundo, quiere aprender a vivir. Este pequeño ser es todo él órgano sensorial. [...]

Sin control, penetran las impresiones en el cuerpo del niño pequeño y el cuerpo responde a estas impresiones. Juega con ellas, imita. El niño no puede reaccionar de otra manera más que respondiendo a las impresiones que recibe con la imitación, con la constante repetición. Practicando de este modo se introduce en la vida. Y es a esto a lo que nos referimos cuando hablamos del "juego" con respecto al niño pequeño.

Como al pez le corresponde el nadar, así al niño le corresponde el jugar. ¿Qué ocurre con un pez si se le pone en un recipiente demasiado estrecho? Empezará a dar coletazos o se quedará quieto y apático. ¿No están nuestros niños en una situación bastante semejante? [...]

El mundo natural hoy en día está impregnado y tapado por una vida artificial e impenetrable. El niño se acostumbra a esta vida artificial. Un niño de ciudad apenas puede ya experimentar las fuerzas y los elementos que mantienen y vivifican a la tierra y a nosotros. [...]

¿Y nos extrañamos aún de que el niño no quiera jugar? ¿Dónde se estimulan sus sentidos con vivencias diversas y auténticas? Lo único que palpa es plástico y ropa de fibra sintética. La rica variación de los olores naturales queda anulada por los gases de los coches y por las emanaciones químicas. Con los abonos químicos la ruta y las hortalizas pierden su sabor original. El ruido del tráfico tapa la variación de sonidos propios de la vida y el silencio. [...]

Todo el mundo sabe que los músculos que no se utilizan se debilitan. Nos hacemos también la pregunta correspondiente: ¿pueden desarrollarse los sentidos de forma viva y despierta si no se estimulan, si no encuentran un campo de acción ameno y diverso? ¿y cómo va la fantasía a vivir esa fuerza misteriosa y creativa que el niño trae consigo con tanta riqueza, si no es estimulada y no recibe un alimento auténtico a través de los sentidos, todo lo más caricaturas más desfiguradas del mundo?"

sábado, 2 de octubre de 2010

Poesía adolescente: Soneto de Francisco Luis Bernárdez

Ponerme a pensar este blog me trae muchas cosas a la memoria, no sólo de mi infancia en colegio Waldorf sino también de mi adolescencia, ya en otro ámbito (es que en mis tiempos no había secundaria antroposófica donde vivíamos).

Este soneto lo repetíamos hasta el cansancio de adolescentes... Me lleva a mi modo introspectivo. Me gusta mucho.

Soneto de Francisco Luis Bernárdez

Si para recobrar lo recobrado
debí perder primero lo perdido,
si para conseguir lo conseguido
tuve que soportar lo soportado,
si para estar ahora enamorado
fue menester haber estado herido,
tengo por bien sufrido lo sufrido,
tengo por bien llorado lo llorado.
Porque después de todo he comprobado
que no se goza bien de lo gozado
sino después de haberlo padecido.
Porque después de todo he comprendido
que lo que el árbol tiene de florido
vive de lo que tiene sepultado.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Una poesía para los adultos: Pausa

De vez en cuando hay que hacer
una pausa

contemplarse a sí mismo
sin la fruición cotidiana

examinar el pasado
rubro por rubro
etapa por etapa
baldosa por baldosa

y no llorarse las mentiras
sino cantarse las verdades.
Mario Benedetti

martes, 28 de septiembre de 2010

Un versito para niños: Ronda del zapatero


Tipi tape, tipi tape,
tipi tape, tipitón,
tipi tape, zapa, zapa,
zapatero remendón.

Tipi tape, todo el día,
todo el año tipitón;
tipi tape, macha, macha,
machacando en tu rincón.

Tipi tape, en tu banqueta,
tipi tape, tipitón,
tipitón con tu martillo,
macha, macha, machacón.

¡Ay tus suelas!, zapa, zapa,
zapatero remendón,
¡ay tus suelas!, tipi, tape,
duran menos que el cartón.

Tipi tape, tipi tape,
tipi tape, tipitón...
Germán Berdiales

¿Vivir o ver televisión?

Estuve releyendo un libro muy interesante (Vivir o ver televisión, de Karin Neuschütz, Editorial Antroposófica) porque, aunque se publicó hace tiempo, ayuda a reflexionar sobre la tecnología y los niños. Habla de la televisión, si bien lo que dice bien se aplica también a la computadora y la Play Station, entre otras cosas...

En casa hace tiempo que no tenemos tele (es decir, como no tenemos cable, el aparato vetusto que tenemos no sirve para ver más que una pantalla azul) y estamos felices. Es increíble lo que uno puede hacer con su tiempo cuando no tiene que mirar tele. Eso sí, todavía no nos pudimos deshacer de la video y el DVD (estamos esperando que se rompan, no pueden durar mucho más, ja ja) y los chicos miran algún rato de uno de los pocos videos que tenemos después del almuerzo cuando llegan cansados de la escuela, siempre que no haya algún amiguito invitado (por empezar, el aparato está en nuestro dormitorio, lo que es buena excusa) o que no prefieran hacer otra cosa (intentamos fomentar esta segunda opción). Ahora que empieza el tiempo lindo, el momento del video es más corto, ni hace falta avisar que ya es necesario apagar, suelen hacerlo solos y bajar a jugar en la casita del árbol, con las sogas, a la pelota, con los bloques, etc. Es verdad que la primavera invita al movimiento, en casa se vive así.

Aquí copio algunos párrafos, pero el libro entero es muy recomendable (se puede conseguir, por ejemplo, en La Casita del Perito Moreno, La Paz 1107, Martínez). La primera parte es más teórica (y muy buena) y la segunda, más práctica, con ejemplos de actividades para no caer en la tele o la compu.

“Constantemente se publican informes sobre los crecientes problemas en los jardines de infantes y escuelas. Los niños se encuentran perturbados en su equilibrio psíquico, están estresados, nerviosos o agresivos, tienen dolores de cabeza, dificultad de contacto, están inhibidos en su desarrollo motor o presentan dificultades en la lectoescritura. Sin embargo, estas perturbaciones alarmantes son relacionadas muy rara vez con el hecho de mirar televisión y video. Una opinión ampliamente difundida es que los programas simplemente no producen daño si son buenos en el contenido. Quien se atreve a hacer, si bien no sea más que una leve indicación acerca de que la televisión podría ser en sí misma nociva, es considerado como un desesperanzado del progreso.”

“Cuando escuchamos o leemos, podemos ‘ver' lo descripto ante nuestro ojo interno en virtud de nuestra fantasía. Nosotros ponemos lo así vivenciado en relación con nuestra propia vida y experiencia. Esto nos lo impide la imagen terminada de la televisión. Durante el programa, el fluir ininterrumpido de la imagen no deja aparecer ningún pensamiento propio acerca de lo que sucede en la pantalla. Luego de finalizado el programa, cuando el televisor está apagado, uno naturalmente puede reflexionar acerca de lo visto. Esto vale para los adultos, pero para un niño la situación es otra. El niño vive en el ahora. No tiene las mismas condiciones propias como para volver más tarde mentalmente a sus vivencias. ¿Cómo se supone que tenga tiempo para elaborar en el juego, mediante sus propias acciones, todas las impresiones de la televisión, si está sentado por horas delante del aparato? ¿Cómo puede un niño formarse una opinión ante tal derramamiento de imágenes?”

“En la niñez se cultiva la semilla del adulto futuro. ¿Cómo debe estar acondicionado el medio que le ofrezca al niño posibilidades óptimas de desarrollo? Ahora bien, el medio debe proporcionarle mucho amor y calidez y debe estimularlo a distintos tipos de juegos. Por el contrario, un comedor oscurecido, en el que titila el televisor es un medio extremadamente insuficiente.

Pensamos con tanto afán en enriquecer constantemente el conocimiento de nuestros hijos que, a menudo, olvidamos que en realidad lo más importante son nuestros brazos a los cuales ellos puedan acudir. En lugar de estar presentes para nuestros hijos, los remitimos a aparatos; a pesar de que sólo nosotros, los padres, somos los que podemos darles seguridad y confianza en sí mismos.

Nos esforzamos mucho en protegerlos de peligros amenazantes para el cuerpo y la vida, como por ejemplo, del tránsito, del frío, de agregados tóxicos en la alimentación, etc. ¿Por qué no mostramos en realidad el mismo interés cuando se trata del desarrollo de su vida interior? Si, mientras los niños son pequeños, nos damos tiempo para construirles un mundo limitado y protegido donde puedan ser felices y puedan jugar y soñar, entonces les estamos dando la mejor oportunidad para que crezcan como personas creativas y ansiosas de saber, que tengan el coraje y la fuerza de dirigir el progreso técnico con el corazón y las manos.”

domingo, 26 de septiembre de 2010

El circo

¡Qué linda tarde pasamos en el circo! Salimos de casa después del mediodía y disfrutamos cada momento. Casi como lo habíamos imaginado... o todavía mejor. Mucha buena onda, alegría, pero un aire relajado, gente contenta, conversar con amigos y conocidos, los chicos jugando en el arenero de jardín, trepados a los árboles, corriendo por donde podían mientras esperaban el momento de la función. (También comiendo riquísimas comidas caseras y tomando jugos exprimidos en el momento, además de unos helados deliciosos). En realidad, la función estuvo muy bien, pero fue lo de menos, toda la fiesta que se generó alrededor fue lo que más disfrutamos. Padres y maestros colaborando para que los niños y sus familias pudieran disfrutar de un día de alegría. Quedamos cansados, pero con el corazón contento.

viernes, 24 de septiembre de 2010

 Invitación al circo de la escuela de mis niños. Además del fin obvio de recaudar fondos, la idea es pasar una tarde amena, juntos, con cosas ricas para comer y cosas lindas para comprar en las tiendas de la escuela.

La cosecha

A propósito de lecturas que parecen adrede... me topé con este texto en la revista El Puente de noviembre de 2007 (una publicación sin desperdicio), que me hizo reflexionar todavía más sobre la comunidad y la importancia de dar sin pensar en recibir. Es que al fin y al cabo, al dar se recibe...

LA COSECHA

Recogemos lo sembrado,
nos devuelven lo que dimos,
ofrecen lo que ofrecimos,
mezquinan lo mezquinado.
Hasta lo que se ha callado,
hasta lo que nadie vio,
hasta lo que se creyó
ya para siempre perdido
canta en otros, y es latido
del canto que uno cantó.

Antonio Alejandro Gil

jueves, 23 de septiembre de 2010

Participación comunitaria

En la escuela de nuestros hijos se está intentando promover una mayor participación de la Comunidad, por y para ella, y otros. Se trabaja "lo social", el arte más elevado, según Steiner. Es así que me surgen muchos pensamientos y encuentro lecturas que me parecen afines al tema. Este cuento, muy conocido, en versión poesía, me recitaba mi abuela.

Escarbando la tierra una gallina...

Escarbando la tierra, una gallina, un granito de trigo se encontró.
-¿Quién sembrará este grano? Preguntoles a un gato, a un perro y a un ratón.
-¡Yo no! Dijeron todos al momento.
-¡Bien, dijo la gallina, lo haré yo!

Cuando hubo germinado el grano
-¿Quién regará la tierra? preguntó.
-¡Yo no! Dijeron todos al momento.
-¡Bien, dijo la gallina, lo haré yo!

Cuando hubieron brotado las espigas.
-¿Quién cosechará el trigo? preguntó.
-¡Yo no! Dijeron todos al momento.
-¡Bien, dijo la gallina, lo haré yo!


Cuando hubo cosechado las espigas.
-¿Quién molerá los granos? preguntó.
-¡Yo no! Dijeron todos al momento.
-¡Bien, dijo la gallina, lo haré yo!

Cuando tuvo la harina preparada.
-¿Quién formará la masa? preguntó.
-¡Yo no! Dijeron todos al momento.
-¡Bien, dijo la gallina, lo haré yo!

Cuando tuvo la masa preparada.
-¿Quién cocinará este pan? preguntó.
-¡Yo no! Dijeron todos al momento.
-¡Bien, dijo la gallina, lo haré yo!

Cuando estuvo cocinado el pan.
-¿Quién comerá este pan? preguntó.
-¡Yo, yo! Dijeron todos al momento.
-¡No, dijo la gallina, lo haré yo!

miércoles, 22 de septiembre de 2010

Introducción

Les confieso que no sé nada de blogs... ¡Este es mi primer post en la vida! Todavía no sé si quiero que me lean... pero lo estoy pensando. Y sí sé que quiero escribir. Y contar sobre lo que estamos viviendo. En la puerta del cambio de septenio, que mi marido atravesó este año, ingresando en el "septenio espiritual", siento algo especial. Tal vez sea mucho llamarlo "un cambio", es más bien una profundización de varias cosas que ya sentía. Y la antroposofía me hace bien, nos hace bien, a toda la familia; nos sana, nos da ritmo ("el ritmo sana", dijo el otro día un maestro de la escuela Waldorf adonde llevamos a nuestros hijos en una reunión de Padres y Maestros, "la falta de ritmo enferma"). Y ese es "mi" sendero, nuestro sendero... una búsqueda, una necesidad de que haya algo más, de encontrarlo, de hallar respuestas y de disfrutar el proceso de descubrirlas. Creo que sí me voy a animar a que me lean. Creo que sí quiero compartir esto tan fuerte que estamos viviendo. "En la época actual necesitamos que las cabezas vuelvan a ser seres humanos completos", dijo Rudolf Steiner, el padre de la antroposofía y de la escuela Waldorf. ¡Cuánta verdad! ¡Cuánto para pensar! ¡Cuánto por aprender!